Me gustas criticona, irreverente,
Como niña que cargada de balas,
Te las dispara juntas con una sola mirada.
Me gustas rebelde, inconforme,
Que con tan fuerte semblante, aunque por dentro con miedo,
Clavas esos ojos miel sin siquiera un pestañeo.
Tan espontánea e impulsiva,
Enojona, frunciendo la frente,
Echando como fuego las palabras que nacen en su mente.
Mujer cambiante, revolucionaria,
Que corre mientras el alma se le escurre entre las manos,
Defendiendo sus principios aunque no porte ningún arma.
Me gustas cuando atacas, cuando te defiendes,
Rápida y ligera, corriendo en busca de sus anhelos,
Tan cansada y fatigada por la indiferencia de los ajenos.
Me gustas con chuchos de frío,
Amiga de la soledad y de las noches de desvelo,
Amante de la cafeína y del humo del cigarrillo.
Me gustas con tus conflictos,
Los tiempos que te tomas, tus espacios,
Cuando te confundes y no sabes retomar el camino.
Me gustas amorosa, cuando me abrazas,
Cuando me muerdes, me besas, y me haces cosquillas,
También me gusta mirarte de espaldas cuando celosa te retiras.
Me gustas tan dualista,
Tan transparente de hablares y misterios en las pupilas,
De sonrisa tan perfecta y lágrimas a escondidas.
De carácter y soberbia entre las masas,
Tan frágil y sentimental cuando apoyas la cabeza en la almohada.
Tan inteligente e intuitiva, mas igual caes en las trampas de la vida.
Me gustas tanto así como eres,
Tan humana, con defectos y virtudes, tienes mi corazón.
Me flechaste, y ahora quiero solo tu dilección.
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